Esta semana fue presentado ante la Asamblea Legislativa, un proyecto de ley le permitiría a los trabajadores del Ministerio de Educación Pública (MEP) migrar al esquema del salario global.
La iniciativa se tramita bajo el expediente legislativo 24305 y es de la diputada Sonia Rojas, del Partido Liberación Nacional (PLN). De acuerdo con el texto de la propuesta, las personas funcionarias del Ministerio de Educación Pública que reciben actualmente un monto de salario compuesto menor que aquel que les correspondería como salario global de su respectiva categoría, tendrían la posibilidad de trasladarse voluntariamente al esquema de salario global que corresponde para su categoría.
El traslado voluntario podría hacerse en un plazo de un año después de que entre en vigencia esta ley, en caso de ser aprobada.
Dicho proyecto no aplicaría solamente a docentes, sino a todos los trabajadores del MEP. Actualmente, existe una iniciativa similar a la anterior en la Asamblea Legislativa para permitir el traslado al salario global de funcionarios de la CCSS.
Propuesta suena atractiva, pero es tramposa
En la exposición de motivos se afirma que los trabajadores del MEP “han sufrido de un congelamiento salarial desde la entrada en vigencia de la ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas (Ley número 9635) y por más de cuatro años no han recibido aumentos salariales contraviniendo el artículo 57 de la Constitución Política de Costa Rica”.
El señalamiento anterior es cierto debido a que en este momento, el salario compuesto está congelado por la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas. Eso implicaría, para quienes están sujetos a este modelo, que seguirán recibiendo un monto menor al salario global, hasta que el congelamiento fiscal lo permita.
El problema viene a futuro, ya que el salario global no está sujeto a aumentos salariales. O sea, solamente será un beneficio de un momento, pero una vez en el salario global, el trabajador quedará sujeto al mismo sueldo el resto de su vida laboral.
