Durante las últimas dos décadas, el pueblo costarricense ha observado cómo múltiples casos de corrupción han manchado al aparato público y a varios empresarios del sector privado.
Casos como el de ICE-Alcatel, Caja-Fischel, La Trocha, El Cementazo, El Caso Cochinilla, el caso Yamber, el caso de ALDESA, los Panamá Papers, el Caso Aztecazo y el caso Diamante, entre muchos otros, hablan de un problema complejo que parece instalado en las altas esferas de las instituciones públicas y corporaciones privadas.
Percepción de la corrupción
Según datos del Índice de Percepción de la Corrupción del 2022, publicado por la Organización para la Transparencia Internacional, Costa Rica cayó nueve posiciones en el ranking de 180 países, ubicándose en la posición 48, con un total de 54 puntos.
Según la organización que desarrolló el estudio, crea una escala de puntaje en donde 0 puntos corresponden al grado más alto de percepción de la corrupción, entre más alto puntaje, mejor percepción de la corrupción. Los 54 puntos obtenidos por Costa Rica lo ubican en la categoría de “democracia deficiente”. Es necesario contar con más de 70 puntos para considerarse como una “democracia plena”. La baja de categoría al país está vinculada con mediciones sobre ambiente, estabilidad política y económica.
A pesar de que el país no se encuentra en una posición crítica o alarmante, sí salta a la vista la necesidad de conducir al país hacia una gestión más transparente de la política y de sus negocios privados de alto impacto.
Algunas leyes que el país no ha aprobado, y ni siquiera parecen ser la prioridad de las autoridades de gobierno y parlamento, son la Ley de Acceso a la Información, Ley de Protección de Testigos en caso de corrupción, Ley de Cabildeo o Lobby político, Ley de Participación Ciudadana y una Regulación de faltas a la probidad en la Asamblea Legislativa. (Semanario Universidad, 31 mayo 2023)
Casos de corrupción terminan en nada
Esa sensación del aumento en la corrupción se ha transformado en un aumento de las denuncias por estos casos. Según datos del Ministerio Público, de la Fiscalía Adjunta de Probidad, Transparencia y Anticorrupción, en el 2015 se ingresaron 146 expedientes por aparentes casos de corrupción, mientras que en el 2019 se admitieron 740 casos.
Sin embargo, una de las principales quejas de la clase trabajadora respecto a los casos de corrupción es que después de destapado el asunto y el juicio mediático, las investigaciones no terminan en nada y la justicia parece hacerse más lenta en este tipo de casos relacionados a figuras de poder.
Así es la situación actual de casos como la Trocha, el Cementazo o el caso Cochinilla, que tuvieron un gran perfil de denuncia, pero los hechos judiciales se quedaron cortos, debido a deficiencias de la ley, falta de recursos para investigación de corrupción y algunos compadrazgos instalados en el interior del aparato judicial.
Según datos del propio Poder Judicial, por cada 100 casos de presunta corrupción solamente siete reciben una clase de sentencia. El resto de casos ni siquiera pasan de la fase investigativa, y son desestimados después de decenas de meses.
La sensación que queda en la población, según indicó el tercer Estado de la Justicia en el año 2020, es de desesperanza: el 50% de la ciudadanía perdió la confianza en la Corte Suprema de Justicia.
Los principales delitos cometidos son el peculado, que es tomar dinero o bienes estatales para beneficio individual, con un 31%. En segundo lugar se encuentra el incumplimientos de deberes al propósito con el fin de obtener o asegurar una clase de beneficio propio, este tipo de delito se da en el 23% de los casos. Y en tercer lugar se encuentra el prevaricato, que significa realizar acciones contrarias a las leyes con el conocimiento de que es un delito, y se da en un 9% de las ocasiones.
Es claro que los principales afectados por los casos de corrupción son las personas trabajadoras que sostienen el Estado y el aparato productivo, y que ven cómo se roban el dinero que aporta día con día. En el caso de la justicia pronta y cumplida para casos de corrupción, ¿y los trabajadores qué?
Fuentes:
Costa Rica – Índice de Percepción de la Corrupción 2022 | Datosmacro.com
La justicia de Costa Rica se atora en los megacasos de corrupción
90% de los casos de corrupción no llegan a juicio
Sitio Web del Ministerio Público – CASOS DE CORRUPCIÓN SE INCREMENTARON EN CINCO VECES DESDE EL 2015